Cumbia ancestral


Mar 21.30 hs. > Los colombianos de Bomba Estéreo volvieron a prender su ritmo psicodélico en Bs. As. ¡Tembló La Trastienda!

Power power recontra power". Mientras la banda le da una vuelta más a un loop de trance profundo, Lil Saumet suelta otra frase ("me gusta la cumbia porque es sencilla" o "dejate llevar") y la deja rebotando entre los bailarines, que agitan brazos o menean caderas. Antes de aplaudir, parecen preguntarse "¿dónde estoy?". Con dos micrófonos (uno con delay), Lil Saumet rapea como guerrillera o canta con sentimiento en la garganta, como si lo hiciera desde las playas de su Santa Marta natal.

Después de un sold out en Niceto, en mayo, el grupo colombiano volvió a Buenos Aires y el coro espontáneo del público afiebrado dejó en claro que ya son mucho más que Fuego (que hasta suena en Showmatch).

¿Electro tropical? ¿Electro vacilón? No alcanza a definir lo que suena en vivo este grupo: Simón Mejía, director y bajista, también suma al hipnotismo con un sintetizador, igual que el guitarrista Julián Salazar, que casi agazapado, se dobla sobre sus acordes. Ninguno busca un solo exitista. Todos aportan al gran viaje de cumbia psicodélica y ancestral, con beat de hoy (que el batero Kike acelera o desacelera con muñeca). Al final, sube Ali Guagua (de Kumbia Queers, las anfitrionas) para versionar Pump Up the Jam con "Agua, que tengo sed". ¡Fiestón!

fuente si de clarin