La compañía presentó en la Argentina sus controles inalámbricos inerciales al estilo de la Nintendo Wii
El próximo Día del Estudiante (o en el inicio de la primavera, según se quiera ver) saldrá a la venta en la Argentina Move, el accesorio para PlayStation 3 con el que Sony entra a competir en el terreno de los controles remotos de movimiento realista. El dispositivo permite, en las consolas de Sony, una interacción similar a la que hizo famosa la Nintendo Wii desde su lanzamiento, en noviembre de 2006 (la PS3 llegó al mercado al mismo tiempo).
Move consiste en una cámara y un conjunto de controles remotos, cada uno con una lámpara en la punta. El sistema se sirve de la cámara para hacer un seguimiento del movimiento de la lámpara del control y reproducirlo en pantalla, pero también recibe información del mismo control, que tiene sensores de movimiento, con lo que detecta flexiones sutiles de la muñeca.
Se pueden tener múltiples controles funcionando en simultáneo. El color de la lámpara del control cambia para diferenciar un jugador de otro; también se pueden asignar dos controles para cada mano de un mismo jugador, si el juego lo requiere. Sony venderá un control, con la cámara y el juego Sports Champions por $ 899; junto con una consola PS3 slim tendrá un precio de $ 3499. Cada control adicional tiene un valor local de 399 pesos.
Los juegos diseñados para Move incluyen la actualización de firmware necesaria. Hay juegos compatibles y otros que no lo son; en http://us.playstation.com/games-and-media/gameslist/index.htm?type=Games&subCategoryType=console&subCategoryValue=PS3 se encuentra más información al respecto.
En LA NACION probamos el sistema, que funciona muy bien; la fidelidad con que el equipo sigue los movimientos de cada control es notable. El uso es muy sencillo, y sólo requiere una mínima configuración, para tomar la posición física de los contrincantes antes de cada juego. Como también sirve de control remoto genérico para navegar los menús y funciones de la PS3, puede resultar una buena inversión para extender el uso de la consola hogareña.
Ricardo Sametband
