La joyita del surf local y su clave para relajarse.
Aunque ni amaga con meterse al agua, ya tiene la atención de la hinchada masculina. Pero la rubia de 18 años demuestra que no es sólo una cara bonita. “El año pasado salí campeona argentina junior y obtuve una mención especial del Comité Olímpico Nacional”.
Lejos de agrandarse, María confiesa que en el mundial disputado en Nueva Zelanda, más que surfear, hizo agua. “No pasé las primeras rondas, pero fue una buena experiencia. Además, el lugar tiene unos paisajes increíbles: me sentía en la peli Avatar ”.
–¿El surf es un ambiente de levante?
–Sí, imaginate que salvo en el verano, que se llena de turistas, después estamos siempre los mismos. Aparte, en general salimos todos a los bares del palo. Por eso se terminan formando muchas parejas.
–¿Qué planes tenés para el futuro?
– Me quiero empezar a tomar al deporte como un hobby. Arranco ahora a cursar Medicina. Y quiero ponerle pilas a eso. Igualmente necesito meterme al agua casi siempre: me baja un cambio y me seda.
–Si pudieras vivir de ésto ¿lo reconsiderarías?
–Tengo tres auspiciantes, pero sólo me dan ropa y tablas. Si tuviera una banca económica y pudiera entrenar sin tener obligaciones, obvio que aceptaría. Para estudiar una carrera tengo tiempo, ¿no?
